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Quién soy - Dra. Arianna Picco
Soy psicóloga clínica, inscrita en el Ordine degli Psicologi della Lombardia (n. 26118) y en el Colegio Oficial de Psicólogos de la Comunidad Valenciana (CV19604). Además, soy psicoterapeuta en formación con orientación cognitivo-neuropsicológica en la Scuola
Lombarda di Psicoterapia (SLOP).
Debido a mi interés por el ámbito penitenciario, en 2023 obtuve un Máster de II nivel en Psicología Jurídica, Penitenciaria y Criminología en la Universidad de Urbino.
Trabajo desde hace años en el contexto penitenciario, donde realizo actividades de apoyo psicológico, observación y tratamiento como experta ex art. 80 o.p. En los centros penitenciarios me ocupo de apoyo psicológico individual orientado a la prevención del riesgo suicida de la población reclusa y de evaluaciones psicológicas dentro de los recorridos institucionales.
A lo largo de los años también he desarrollado experiencia en el ámbito de las adicciones, ofreciendo apoyo psicológico a personas privadas de libertad con dificultades relacionadas con el uso de sustancias y acompañándolas en sus procesos de crecimiento personal.
Mi experiencia profesional se ha enriquecido también en el extranjero, en España, donde he vivido periodos de trabajo y formación. Esto me ha permitido no solo profundizar en la lengua española, sino también conocer contextos culturales diversos, ampliando mi
perspectiva clínica y personal.
Por este motivo hoy ofrezco apoyo psicológico tanto en italiano como en español, tanto presencial como online.
Para mí, el apoyo psicológico no es “curar un síntoma”, sino volver a anudar el hilo de la propia historia: reconocer lo perdido, dar voz a lo no dicho, reencontrar el coraje de sentirse vivo de nuevo.
Mi enfoque nace de la convicción de que el bienestar psicológico no deriva de convertirse en otra persona, sino de volver a ser uno mismo con más libertad, conciencia y autenticidad.
Te recibo en un espacio de calma, escucha y posibilidad, donde cada encuentro es un paso hacia el descubrimiento de tu manera única de existir.
MI HISTORIA
Desde niña siempre me han guiado la curiosidad, el asombro y el deseo profundo de explorar el mundo. Viajes, lenguas y culturas no han sido solo una pasión, sino una forma de conocer a las personas: a través de las palabras, los gestos y los hábitos, siempre he buscado comprender qué mueve al ser humano, sus vínculos y su manera única de estar en el mundo.
Esta necesidad de explorar me llevó a viajar mucho y a vivir un tiempo en España, un paísque se ha convertido en mi segunda casa. Allí tuve la oportunidad de crecer tanto a nivel personal como profesional: obtuve el reconocimiento del título de psicóloga y me colegié, ampliando aún más mi forma de pensar, observar y encontrarme con las personas.
Hoy realizo apoyo psicológico en italiano y español, manteniendo las lenguas como herramienta de conexión y comprensión.
Si tuviera que describir el corazón de mi enfoque, diría que nace de dos elementos que siempre me acompañan: el asombro, que me recuerda que cada persona es un mundo nuevo por descubrir, y el cuidado, que me permite estar cerca del otro sin juicio, con verdadera disponibilidad para escuchar.
Mi recorrido profesional está entrelazado con mi vida personal: soy alguien que ama aprender, viajar, dejarse sorprender; y ese mismo espíritu acompaña cada sesión, cada encuentro, cada historia que me es confiada.
MI MISIÓN
El corazón de mi trabajo nace del deseo de ofrecer un espacio seguro, humano y auténtico, en
el que cada persona pueda reencontrar continuidad, significado y posibilidad.
Mi misión se fundamenta en cuatro pilares que guían cada encuentro, cada palabra, cada paso del proceso psicológico.
Escucha
Todo camino empieza en un espacio de acogida donde la palabra puede emerger sin juicio.
La escucha, para mí, es un acto de presencia: significa estar de verdad, dejando espacio a la unicidad del otro y a su manera particular de sentir, pensar y existir.
Es el punto desde el que todo comienza.
Conciencia
La conciencia es el centro del proceso psicológico.
Reconocer lo que se vive —pensamientos, emociones, relaciones, patrones— permite comprender la propia experiencia y, desde ahí, transformarla.
Es en la conciencia donde nace la posibilidad de recuperar equilibrio, continuidad y nuevas formas de responder al mundo.
Curiosidad y asombro
“Conserva tu asombro por todo lo que es nuevo.”
Esta frase acompaña desde siempre mi manera de trabajar.
La curiosidad es un movimiento vital: abre, expande, permite mirar desde perspectivas distintas.
El asombro posibilita el cambio, porque nada está completamente definido, y en lo nuevo suele esconderse un conocimiento inesperado.
Autenticidad y continuidad
Todo recorrido psicológico es un retorno a uno mismo, una recuperación de la propia voz interior.
El objetivo no es convertirse en alguien distinto, sino reconectar con la propia historia, integrar sus fragmentos y devolver coherencia al propio modo de vivir. Cultivar autenticidad significa habitarse con más verdad; cultivar continuidad significa aprender a llevar esa verdad a la vida cotidiana.
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